La iniciativa fue aprobada el 16 de septiembre de 2025 con 33 votos a favor y 20 en contra, según confirmó el portal oficial del Congreso y medios nacionales.
Una declaración de carácter político
El texto aprobado tiene alcance político y simbólico, no legislativo. Esto significa que no obliga directamente al Gobierno nacional a adoptar medidas, pero sí constituye una exhortación al Ejecutivo para que evalúe acciones frente a dicha organización.
Durante el debate, varios senadores argumentaron que el Cártel de los Soles —presuntamente conformado por miembros de las fuerzas armadas venezolanas— estaría vinculado con el narcotráfico, el lavado de activos y la protección de redes criminales en la frontera.
Diferencias con el Gobierno Petro
Aunque la decisión del Senado refleja un consenso parcial dentro del Legislativo, el presidente Gustavo Petro ha sostenido una postura distinta. En declaraciones a la agencia Associated Press (AP), el mandatario aseguró que “en nuestras investigaciones judiciales sobre el narcotráfico no aparece un cártel de los soles”, agregando que los flujos de droga hacia Venezuela provienen de otros actores y rutas.
Esta diferencia de posiciones marca un nuevo punto de tensión entre el Congreso y el Ejecutivo, especialmente en lo referente a la relación diplomática con el gobierno de Nicolás Maduro, con el cual Colombia ha venido restableciendo lazos desde 2022.
Implicaciones políticas y diplomáticas
La declaratoria del Senado no modifica la política exterior de Colombia, pero sí aumenta la presión política sobre el Gobierno para adoptar una postura más firme frente al régimen venezolano y las redes del crimen transnacional.
Analistas en seguridad y relaciones internacionales advierten que la medida podría abrir la puerta a nuevos debates legislativos sobre cooperación judicial, control fronterizo y estrategias contra el narcotráfico.
Aunque la proposición del Senado no tiene efectos jurídicos inmediatos, sí refleja el creciente interés político en Colombia por endurecer la postura frente al crimen transnacional y la situación en Venezuela.
El pronunciamiento legislativo, más allá de su carácter simbólico, marca un precedente político que podría influir en futuras decisiones sobre seguridad, cooperación internacional y relaciones bilaterales.
Por ahora, el Gobierno nacional mantiene su posición: no existe reconocimiento oficial del Cártel de los Soles, mientras el Congreso insiste en que el país no puede permanecer indiferente ante una amenaza que según advierten, afecta la estabilidad regional.
