Autoridades y organismos internacionales exigen la liberación inmediata de la misión médica secuestrada en La Plata, Huila
En medio del dolor y la incertidumbre, el país entero clama por la pronta liberación de los ocho integrantes de la misión médica que fueron secuestrados mientras cumplían con su labor humanitaria en zona rural de La Plata, Huila.
Las víctimas —seis trabajadores de la salud y dos conductores de la E.S.E. San Sebastián— fueron identificadas como las auxiliares de enfermería Aidé Q., Nicol G., María M. y Jhon R., la enfermera jefe Estefanía S., la médica Natalia S., y los conductores Freiner C. y Helmer Manolo D.. Todos ellos fueron retenidos por la estructura ‘Hernando González Acosta’, perteneciente a las disidencias de las FARC al mando de alias ‘Iván Mordisco’.
El secuestro ocurrió en la mañana del miércoles, cuando el grupo se desplazaba hacia las veredas Agua Bonita y Buenos Aires para desarrollar una brigada de salud, llevando atención y esperanza a comunidades rurales del occidente huilense.
Ante los hechos, el secretario de Gobierno del Huila, Juan Carlos Casallas Rivas, expresó el rechazo total del gobierno departamental:
“Este es un acto que rechazamos y condenamos de manera categórica. Hacemos un llamado a los miembros de este grupo armado ilegal para que liberen de manera inmediata a estas personas que hacen parte de la Misión Médica, un organismo neutral. Este hecho representa una grave violación al Derecho Internacional Humanitario. Solicitamos y exigimos que se les respete la vida y se garanticen sus derechos”, señaló el funcionario.
De igual forma, la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia se unió al clamor, exigiendo desde su cuenta oficial en X la liberación inmediata del personal retenido.
Mientras tanto, las autoridades locales y organismos de derechos humanos adelantan gestiones urgentes para facilitar su liberación. Las familias de las víctimas, así como la comunidad de La Plata, viven horas de angustia y esperan que estas ocho personas puedan regresar pronto a salvo, para continuar con la misión que les da sentido: salvar vidas.