Como Javier Ninco Hurtado fue identificado el labriego que falleció tras ser sorprendido por una creciente súbita en zona rural del municipio. El hombre terminó arrastrado, cuando intentaba rescatar su motocicleta que había quedado atorada en su paso por la quebrada El Carmen.
La ola invernal cobra la vida de una nueva víctima en el departamento del Huila. En esta ocasión falleció un agricultor de 46 años de edad identificado como Javier Ninco Hurtado en zona rural del municipio de Santa María. El hecho se registró por la creciente súbita de un afluente en el sector conocido como La Lindosa, ubicado en la vereda Santa Librada, de la localidad.
Según información oficial, el suceso se registró siendo aproximadamente las 2:00 de la tarde de ayer, cuando el hoy occiso se movilizaba a bordo de una motocicleta, en compañía de su hermano el señor Álvaro Ninco Hurtado, con quien intentó cruzar la quebrada El Carmen, que en ese momento tenía un caudal poco peligroso, sin embargo, ocurrió lo inesperado.
Justo cuando iban a pasar de una orilla a la otra, el velomotor sufrió de una falla, ocasionando que se apagara y quedara atorada en medio del agua. Allí su pariente descendió y fue por ayuda, buscando un laso para poder rescatar la moto. En el sitio, quedó Javier sosteniendo el velomotor. Es de precisar que minutos antes había caída un fuerte aguacero por el municipio, lo que ocasionó que la quebrada creciera en ese momento.
Es así como aumenta el nivel del agua mientras el labriego permanecía en la mitad de la fuente hídrica. Tras luchar contra la corriente, terminó siendo arrastrado junto a la moto por varios metros. Cuando llegó su hermano a buscarlo, la víctima no estaba en el lugar en el que había quedado, por lo que inmediatamente solicitó ayuda a la comunidad que informó al Cuerpo de Bomberos de la población.
Durante varias horas se extendieron las labores de búsqueda en la rivera del afluente. Sólo hasta las cinco de la tarde, fue encontrado sin vida. Su cuerpo había quedado en inmediaciones de la vereda San Joaquín. Fueron tres horas de angustia y zozobra, donde los moradores de la zona, en apoyo de los rescatistas, intentaron salvar la vida del afectado, pero infortunadamente este ya no tenía signos vitales.
Las autoridades realizaron el levantamiento del cadáver, para trasladarlo a la morgue del municipio. Conocidos y allegados del occiso, extendieron sentidos mensajes de condolencia a la familia, por su inesperado deceso.
