En un duelo intenso y equilibrado, el combinado nacional cayó 1-0 ante Argentina en la semifinal del Mundial Sub-20, disputada en el Estadio Nacional de Santiago.
Un primer tiempo de esperanza
Colombia mostró carácter desde el inicio. Presionó alto, buscó la posesión y generó opciones con Kevin Mantilla y Óscar Cortés, aunque sin la precisión necesaria frente al arco. Argentina, más paciente, esperó su momento y apostó por la contundencia.
El golpe decisivo
El marcador se abrió en el minuto 72. Mateo Silvetti, figura del encuentro, aprovechó un rebote en el área para definir con frialdad y darle la ventaja a la Albiceleste. A partir de ahí, los dirigidos por Javier Mascherano controlaron el ritmo y administraron el resultado.
La expulsión que cambió todo
La esperanza tricolor se desvaneció cuando Jhon Rentería fue expulsado al 78’ por doble amarilla. Con un hombre menos, el equipo de Héctor Cárdenas perdió profundidad y sus intentos por empatar se diluyeron entre la desesperación y la firme defensa argentina.
Lo que viene
Pese a la derrota, Colombia deja una imagen positiva en el torneo, destacando por su fútbol ofensivo y el talento de sus jóvenes promesas. El sábado jugará ante Francia por el tercer puesto, buscando cerrar con dignidad una campaña que ilusionó a todo un país.
Argentina, por su parte, enfrentará a Marruecos en la gran final, en busca de su séptimo título mundial Sub-20.
Colombia se despide con la cabeza en alto. No alcanzó la final, pero reafirmó que el futuro del fútbol colombiano está en buenas manos. La ilusión se detuvo por ahora… pero el sueño continúa para una generación que promete volver más fuerte.