Dallana Paola, quien tiene un hijo de un año con Vargas, manifestó que la más reciente agresión de su compañero sentimental fue en su casa, el pasado viernes, hacia las 9:30 de la noche, cuando alistaba un viaje de trabajo a la ciudad de Ibagué (Tolima).
“El tema empieza porque yo tenía que salir a viajar a la ciudad de Ibagué a vender un equipo, por lo que él me dice que esos son chinos, que quien sabe que iba hacer, por lo que le dije que entonces fuéramos juntos, él me dice que no puede por los permisos de los escoltas”, indicó la joven.
Señaló que mientras ella empacaba el computador y elementos del trabajo, él le dice que si se llamaba a la Policía para que se llevaran al niño y le sacaba las cosas a la calle. “Seguimos discutiendo por el viaje y él me decía que yo me iba era con mi jefe. Le escribió a mi jefe no sé qué cosas por lo que decidí no ir a el viaje, pero como él prácticamente me hecho de la casa yo seguí organizado maletas para irme para Bogotá para donde mis padres”.
En medio de la discusión y con el paso de los minutos, indica Dallana Paola, se quedó en la habitación, mientras que Vargas daba vueltas en la casa, ingresó a la habitación donde están las cámaras. “Me imaginó que las desconectas”.
Recordó que su compañero sentimental va a la cocina, después regresa a la habitación donde ella está con el bebé, cierra la puerta y me dice le vuelve a decir que le entregue el celular. “Yo no quiero problemas con usted, yo estoy dispuesto a todo…”.
Sostuvo que en el momento que ella intensa salir de la habitación es arrinconada contra la pared por Vargas, quien, supuestamente la intimida con un cuchillo. “Él tenía un bolso de blanco con negro y saca un cuchillo de cacha de madera de color café y me repite entrégueme el celular que yo estoy dispuesto a todo, sentí mucho miedo, e intento defenderme, lo empujo, le cojo las manos el intenta apuñalarme en varias ocasiones pero como yo le tenía las manos no me pudo hacerme daño”.
Entre la pareja se presenta un forcejeo, caen al piso y allí, señala la mujer, el hombre le presiona la cara con el pie. “Yo intento pegarle una patada en la entrepierna pero no pude pegarle, sigo forcejeando e intento correr para la puerta pero nos vamos al suelo, me golpea, me pone el pie en la cabeza, sobre el oído derecho, me hace presión contra el piso y a la misma ves intenta como empujarme la cara pegada al piso”, relató Dallana Paola.
En medio del forcejeo y los gritos de la joven pidiendo que llamen a la Policía, salen al balcón donde vecinos se dan cuenta de lo que sucede. “Él coge mi celular, yo dije “este man me va a matar”, comencé a gritar, llamé al escolta y le decía que llamaran la Policía, como puede alce las piernas, lo empujé como para el baño, me levanté, el me seguía tomando de las manos en todo momento y decía “Dallana, cálmese, que está haciendo”, como queriéndome hacer ver como si yo fuera la que lo estuviera atacando, hay el salimos al balcón y yo seguía gritando”.
Sostuvo que la vecina que observó lo que pasaba en el balcón recriminó a Vargas y le señaló que no era la primera vez que la agredía. “Salió una vecina y comenzó decirle que me soltara, que no era la primera vez que el me pegaba. Él me soltó y siguió discutiendo con la señora, yo salgo a correr, cojo a mi bebe, el escolta se da cuenta lo que estaba pasando e intenta ayudarme abrir la reja, pero en eso llega Alexander y me arrincona nuevamente con mi bebe en los brazos”.
Una patrulla de la Policía metropolitana de Neiva llegó a la vivienda, luego de ser alertada de lo que sucede, sin tomar medidas al respecto. “Se les comentó el caso, pero no hicieron nada, salí me fui para urgencias de la Medilaser donde estuve en observación hasta el día de hoy (sábado) 18”.
Solo fue hasta el sábado en la tarde que hizo presencia la patrulla púrpura para conocer el caso y activar la ruta de maltrato. “A eso de las tres de la tarde, llegó la patrulla de la policía purpura y me hicieron el acompañamiento hasta que llegué a la Fiscalía”.
“Lo único que hice fue defenderme de las agresiones de ella”
El defensor de derechos humanos, Alexander Vargas, le salió al paso a la denuncia del presunto maltrato intrafamiliar contra su compañera sentimental Dallana Paola Mora Espitia, al señalar que él ha sido víctima de ese maltrato.
“Yo creo que como toda persona, hay una acción que contiene una reacción. Ya en varios meses he venido siendo víctima de maltrato por parte de la señora Dayana. Lo que pasa es que nosotros los hombres nunca ponemos esto en conocimiento ante las autoridades, ni nadie, porque uno le causa vergüenza, porque piensen de que es el hombre que se deja pegar, que le generen bullying”, dijo Vargas.
Sobre las presuntas agresiones que habría cometido contra su compañera sentimental, manifestó que fue ella quien lo atacó, ante el reclamo que él le había hecho porque se iba de viaje para Ibagué estando el niño enfermo. “El día viernes ella llegó a la casa, tenemos el nene de 1 año, estaba enfermo, lo que le llaman acá descuajado, llega a las 7 de la noche, me dice Alexander, “Yo me tengo que ir para Ibagué en estos momentos porque mañana tengo que estar allá, le digo cómo te vas a ir, si aquí tengo el niño enfermo”, manifestó el hombre.
Vargas le advirtió que se iba no solo llamaba a la Policía por dejar el niño sino que se fuera de la casa para donde los papás de ella. “Dayana, si usted se va, me toca llamar a la Policía porque nuestro niño no puede quedar acá con nosotros solos. Si usted se va para Ibagué, por favor coja todas sus maletas y de una vez váyase para Bogotá con sus papás. Inmediatamente le pedí el teléfono”.
Reiteró que la joven mujer ha sido la agresiva con él, al punto de abusarlo sexualmente. “Ella en varias veces ha sido muy agresiva conmigo, he sido víctima de abusos sexuales por parte de ella, tengo los videos”.
Precisó que el viernes tomó un cuchillo para defenderse de un presunto ataque que le hiciera ella con tijeras. “Todos estos hechos llegaron como a su rebozo el día viernes cuando fui a quitarle el teléfono, yo llegué y cogí un cuchillo de acá de la cocina porque ella ya estaba metida con el tema de una tijera. Inmediatamente me fui y dije, si ella me llega a tirar con la tijera, me toca sacar esto como por tratar de que no me tire, ni nada”.
No obstante señaló que no sería capaz de hacerla daño. “Cuando fui a quitarle el teléfono, y nunca en mi vida traté, ni puse el cuchillo en cuello, nunca”.