Gobierno radicó reforma tributaria: cerveza, cigarrillos y gasolina entre los productos con más impuestos.
El ministro de Hacienda, Germán Ávila, presentó este lunes en la Cámara de Representantes el proyecto de Ley de Financiamiento, una reforma tributaria con la que el Gobierno espera recaudar $26,3 billones. Los recursos se destinarán a cubrir parte del Presupuesto General de la Nación para 2026, que asciende a $557 billones, la cifra más alta en la historia del país.
La iniciativa contempla ajustes en impuestos de renta y patrimonio, modificaciones al IVA, creación de tributos ambientales y gravámenes al consumo de bienes específicos como licores, tabaco y combustibles. Según el Ministerio de Hacienda, la propuesta tiene un enfoque progresivo, buscando que los sectores con mayores ingresos aporten más al sistema tributario.
Principales medidas de la reforma
- Renta y patrimonio: se actualizan las tarifas progresivas para personas naturales, con una tasa marginal máxima del 41%. El impuesto al patrimonio aplicará a partir de los 40.000 UVT, con tarifas que llegan hasta el 5% en los patrimonios más altos. Las entidades financieras asumirán un recargo adicional en su impuesto de renta.
- IVA: no se gravarán los alimentos básicos de la canasta familiar, pero se eliminan beneficios a bienes y servicios de consumo de altos ingresos. La gasolina y el ACPM tendrán un IVA del 10% en 2026 y 2027, que subirá a la tarifa general del 19% desde 2027 y 2028, respectivamente. Los biocombustibles y vehículos híbridos también pasarán a estar gravados con tarifa plena.
- Consumo: licores, vinos, cigarrillos y productos de tabaco, incluidos vapeadores, estarán sujetos a mayores impuestos, con parte de este recaudo destinado al aseguramiento en salud.
- Impuestos ambientales: se refuerza el impuesto al carbono y se crea un tributo especial para la extracción de hidrocarburos y carbón. Una parte de los recursos financiará programas de conservación ambiental y sustitución de cultivos ilícitos.
- Activos digitales: las plataformas deberán pagar un 5% de impuesto y reportar operaciones superiores a 1.400 UVT anuales.
El proyecto también incluye medidas transitorias como la normalización tributaria para activos omitidos, reducciones en sanciones e intereses, y estímulos a la facturación electrónica.
El Gobierno insiste en que la ley no solo busca atender las necesidades inmediatas del presupuesto de 2026, sino también garantizar la estabilidad fiscal del país en el mediano plazo. “Este es un pacto fiscal que pretende blindar las finanzas públicas más allá de un solo gobierno”, señaló el ministro Ávila.
No obstante, el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF) advirtió que el ajuste requerido para cumplir las metas fiscales es mayor, calculado en $45,4 billones, lo que supera ampliamente lo previsto en la reforma.
La iniciativa llega al Congreso en un ambiente de amplio debate político y económico, en medio de cuestionamientos sobre su impacto en los hogares, las empresas y la competitividad del país.
