Un joven que fue reportado como desaparecido en Medellín fue asesinado, enterrado en una fosa y sepultado con cemento para que nadie lo encontrara.
Su familia dice que logró llegar hasta la escena del crimen gracias a las instrucciones de una vidente.
Kevin Stiven Gómez salió de su casa el 14 de septiembre en Medellín y nunca regresó.
Cada minuto era desolador para su familia. Lo buscaron en hospitales, estaciones de Policía y Medicina Legal, pero nadie daba razón de él.
Pasaron los días y su desaparición era extraña y misteriosa.
Su familia, quien no quiso hablar en cámara por seguridad, dijo que el día del hallazgo recibieron un mensaje de una vidente quien días atrás expresó su intención de ayudar a encontrarlo.
Fue a las 3 de la mañana cuando la mujer impulsó a la familia para que siguieran unas coordenadas que nadie se explica cómo las obtuvo y después de mucho caminar, llegaron al terreno baldío, según las indicaciones de la mujer.
Sus parientes, confiados en la supuesta orientación, siguieron las indicaciones, empezaron a cavar y se encontraron con un fatal desenlace.
Los tatuajes fueron clave para su identificación. Kevin Stiven Gómez fue asesinado y enterrado en este lugar. Por más de 5 horas investigadores del CTI, avanzaron en la inspección judicial de un extraño hallazgo por una supuesta mujer experta en las ánimas.
