Minerva Castellanos tiene pocos recuerdos en su vida. Los 102 años de edad le han hecho olvidar distintos episodios, pero hay algo que tiene muy presente y es el nombre de Vitricio, un loro que la ha acompañado durante 50 años y que fue decomisado por parte de la Policía Ambiental.
“Vitricio, Vitricio, ven a comer”, grita una y otra vez, sentada en su mecedora, en medio de la humildad que la ha caracterizado. Sin embargo, el loro está a muchos kilómetros de ella, en un centro de rehabilitación de la Corporación de los Valles del Sinú y San Jorge, CVS, donde le adelantarán un proceso de rehabilitación para devolverlo a su hábitat natural.
Tal vez el loro no lo resista. Ha pasado toda su vida al lado de esa familia y aunque las leyes prohiban tener este tipo de especies como mascotas, en Córdoba se ha desatado una campaña para que devuelvan a Virticio al seno de su hogar.
De acuerdo con lo señalado por Eliana Guerrero, nieta de Minerva, ella viajaba con el loro a casa de su abuela y en un retén la Policía Ambiental lo decomisó, señalando que se trataba de una especie silvestre, que no podía mantenerse en cautiverio.
El animal fue entregado a la CVS, pero Eliana insiste en que él ha pasado toda la vida con ellos, creció al lado de los humanos y ahora que ya es un anciano, sería más perjudicial devolverlo a su hábitat que dejarlo junto a ellos.
“Vamos a enfocarnos en que la familia puede tener el animal” Abogado defensor del caso Vitricio El jurista trajo a colación el caso del perro Clifor, un schnauzer que fue reconocido por un juez como miembro de una familia colombiana. Francisco España, abogado defensor de la familia tendora de ‘Vitricio’, un loro ciego de cerca de 50 años, entregó detalles de los argumentos que utilizará para que el ave sea devuelta a Minerva, una adulta mayor que en los años 70’s adquirió al animal como un regalo de su difunto esposo y al que hace un par de meses le cedió a su nieta Eliana para que ella lo cuidara.