La comunidad exige políticas de infancia y adolescencia para proteger los derechos de los menores.
Miembros activos de la Asociación Indígena Kankuamos Unidos de la Sierra Nevada de Santa Marta, con sede en Atánquez (Cesar), denunciaron ante la Fiscalía General de la Nación una presunta violación múltiple de una niña de 12 años perteneciente a esta etnia.
El hecho ocurrió en el asentamiento El Mojao, zona rural de Atánquez, jurisdicción de Valledupar.
Según la asociación, el padre de la menor reveló la situación hace dos semanas a las autoridades kankuamas, pero al parecer estas lo ignoraron porque, supuestamente, algunos miembros del cabildo estarían involucrados.
"Al parecer, la niña venía sufriendo abusos sexuales aproximadamente hace dos años por seis hombres, varios de ellos presuntamente pertenecientes a esta etnia, de los cuales tres son menores de edad. Como consecuencia, la menor resultó embarazada", relató Nora Pacheco, secretaria de la Asociación Kankuama.
El caso fue puesto en conocimiento al Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual de la Fiscalía Seccional Cesar, donde se inició una ruta investigativa sobre la presunta violación cometida, mediante la recopilación de elementos probatorios para establecer la veracidad del hecho.
La Asociación anunció que seguirá trabajando en defensa de los derechos de los indígenas kankuamos, especialmente por la protección de su niñez.
En igual sentido, exigieron políticas de infancia y adolescencia a la Organización Indígena Kankuama, a través de programas de educación sexual donde prevalezca la prevención de los abusos sexuales con un componente de principios y valores, dentro del territorio del Resguardo Indígena Kankuamo para salvaguardar los derechos de los menores.
"Para evitar más violaciones como las que probablemente se estarían presentando en las comunidades de Guatapurí, Chemesquemena, Atánquez, Pontón, Ramalito y El Mojao, de las cuales ellos tienen conocimiento, donde en algunos casos revictimizan más a las familias víctimas de este flagelo", subrayó la organización.
Niegan omisión del deberA partir de las denuncias formuladas por miembros de esta asociación, el gobernador kankuamo, Jaime Arias, negó la omisión del deber y aclaró que la comunidad tiene directrices de las autoridades frente a los procesos y procedimientos de estos hechos.
"En el 2012, dada la gravedad de los delitos de violación sexual que se presentan en algunas comunidades, se vienen tratando desde la jurisdicción ordinaria. La posición nuestra es tolerancia cero a estas situaciones, estamos de acuerdo en que se apliquen estas sanciones", afirmó el gobernador.
"Sí investigamos este caso y lo denunciamos ante las autoridades competentes. Guardamos prudencia ante la opinión pública porque sería revictimizar a los menores. Abordamos este tema con acompañamiento psicosocial unido a nuestros procesos culturales”, puntualizó.
