La difusión de un video que capta una violenta agresión entre estudiantes de la Institución Educativa Ceinar ha encendido las alarmas en la comunidad educativa de Neiva y ha forzado la implementación urgente de medidas correctivas por parte de las directivas del plantel. Tanto la institución como la Secretaría de Educación activaron los protocolos para recuperar el orden y la convivencia.
Hernán Guillermo Galindo M
La grabación, que se viralizó rápidamente en redes sociales, que muestra a una estudiante agrediendo con brutalidad a otra, identificada como alumna del programa de danzas, mientras un grupo de compañeros se limita a observar y grabar la escena sin mediar para detener la golpiza, encendió las alarmas en torno a la convivencia entre los alumnos en la Institución Educativa Ceinar de Neiva.
El episodio sacó a la luz denuncias de padres de familia, quienes bajo condición de anonimato por temor a represalias, aseguraron que este acto de bullying no es un hecho aislado. Según sus testimonios, existen quejas previas por situaciones similares que habrían sido ignoradas por las directivas del colegio, a las que señalaron de negligentes.
Comité de convivencia
Frente a la creciente presión social y la alarma generada, el personero estudiantil de la institución, Emanuel Medina, se pronunció oficialmente. En declaraciones a LA NACIÓN, Medina confirmó que el Comité de Convivencia del Ceinar se reunió de manera extraordinaria en el día de ayer para analizar el grave hecho.
“El día de ayer se dio seguimiento a la ruta institucional establecida y se tomaron las medidas correspondientes”, indicó. En el comité se evaluaron las medidas y se analizó el conflicto con la participación de ambas partes involucradas y se tomaron decisiones internas, aplicando las correcciones respectivas según lo establecido en el manual de convivencia para dar solución a este tipo de situaciones, explicó Medina.
En cuanto a las medidas específicas se adoptaron: primero, se hizo un análisis personal con las estudiantes, donde se les dio un espacio para la reflexión. Posteriormente, el caso fue remitido a las EPS correspondientes para su evaluación, seguimiento médico y acompañamiento psicológico, para que cada estudiante reciba atención profesional especializada en el manejo de la agresión y el control de la ira.
Dijo además que, paralelamente, se implementará una estrategia de intervención inmediata para que, en lugar de grabar este tipo de situaciones, los estudiantes sepan separar a los involucrados y evitar que las riñas escalen.
Es importante precisar que en el momento de los hechos no había un docente presente debido a que la Secretaría de Educación había convocado a varios profesores para los Juegos del Magisterio en Rivera. La profesora que normalmente estaría a cargo tenía un permiso oficial por esta actividad.
Una vez conocido el caso, se activó la atención inmediata y se dio seguimiento a la ruta establecida. Entre las medidas aplicadas, y considerando que no solo involucraba a las dos estudiantes sino al grupo observador, se dispuso la realización de un trabajo comunitario donde los jóvenes trabajarían unida y solidariamente para sanar estos errores y mejorar la convivencia interna.
Como mensaje final, dijo: “hago un llamado para que estos sucesos no sigan repitiéndose. Que desde las instituciones y desde casa se promueva la sana convivencia, el respeto, la tolerancia y se aprenda a manejar los conflictos de manera personal, sin dejarse llevar por la impulsividad del momento”.
¿Qué dijo la Secretaría de Educación?
Por su parte, la Secretaría de Educación Municipal manifestó que, aunque viene implementando protocolos estándar para la convivencia escolar, supervisará de cerca el caso para verificar que las acciones emprendidas por el Ceinar sean suficientes y efectivas. La comunidad, sin embargo, clama por acciones más contundentes y ejemplares que prevengan una tragedia mayor.
“Estamos abordando esta problemática de manera integral, con el apoyo de organismos defensores de derechos humanos, reconociendo que se trata de una situación que afecta tanto a establecimientos educativos oficiales como no oficiales”, manifestó Monroy.
Agregó que están trabajando activamente con los gobiernos escolares en este propósito. “Si bien es cierto que se presentan brotes de violencia escolar, contamos con mecanismos de detección temprana a través de nuestros personeros estudiantiles y contralores, quienes nos reportan oportunamente estos eventos”, expresó.
Finalmente, indicó que esta es una responsabilidad compartida que involucra a todas las partes: padres de familia, instituciones educativas y, desde luego, el gobierno municipal a través de la Secretaría de Educación. “Reiteramos nuestro compromiso y total acuerdo en que debemos continuar fortaleciendo las estrategias para el mejoramiento de la convivencia escolar en el municipio”, concluyó.
