Niños, niñas y jóvenes de la Institución Educativa El Carmelo, en el municipio de La Plata, Huila, lideran actividades de monitoreo ambiental enfocadas en el cuidado del agua y la biodiversidad de la microcuenca Barbillas.
Desde edades tempranas, estudiantes de la sede Fátima recorren los alrededores de la quebrada Barbillas para recolectar macroinvertebrados acuáticos —organismos que sirven como indicadores biológicos—, mientras que los de grados superiores realizan mediciones del caudal del afluente que abastece el acueducto del municipio.
Estas actividades se desarrollan con el acompañamiento técnico de la CAM, en el marco del Plan de Manejo Ambiental de la Microcuenca Barbillas. El objetivo es fortalecer la educación ambiental desde la práctica y fomentar el reconocimiento de la riqueza ecológica local.
El proyecto hace parte del Plan de Manejo Ambiental de la Microcuenca Barbillas e incluye a comunidades de varias veredas: Fátima, Las Mercedes, San Juan y Alto Cañada. “El monitoreo ambiental es participativo. Hoy medimos caudales con dos métodos diferentes. El primero con un caudalímetro con orientación de la CAM y el otro con el método flotador que es el que vienen implementando en la institución”, señaló Diana Maribel Oviedo Vega, profesional de apoyo del PMAM Barbillas.
Oviedo agregó que también se observan “los parámetros de calidad y macroinvertebrados para medir la calidad del agua. Se incluyó el tema de avistamiento de aves para que los niños, niñas y la comunidad reconozcan la avifauna que hay en este territorio”.
El proyecto involucra a estudiantes de diferentes grados, docentes, directivos, padres de familia y actores institucionales. Surgió en 2020 con iniciativas como huertas escolares y ha evolucionado hacia una propuesta integral que fomenta el reconocimiento del territorio y la biodiversidad.