El curioso caso ocurrió el lunes pasado en un remoto lugar al norte de la isla de Tenerife, en la playa de Las Teresitas, cuando un hombre escuchó por más de dos horas un claxon y al acercarse al parqueadero en la arena vio a una mujer dentro de un vehículo.
Así lo narró el diario español El Mundo, quien dio detalles del particular hecho, cuyo propósito lo dio a conocer la mujer una vez fue liberada de su propio capricho, según ella porque llevaba mucho tiempo sin compartir con un hombre.
Al parecer hasta el vehículo se acercó una patrulla de la policía una vez fue avisada por un testigo de que algo raro estaba pasando en el interior de un vehículo Citroën 3.
Al iluminar el interior, los agentes observaron que había una mujer maniatada contra el volante del carro, bastante lastimada y con el rostro descompuesto.
En un principio creyeron que se trataba de un caso de rapto o secuestro, pero luego se darían cuenta que era otra cosa: una fantasía sexual. Las manos las tenía atadas con cordones de plástico, con las palmas contra el rostro y en una posición bastante incómoda. Hasta que la situación se salió de control y ella perdió movilidad, con la única posibilidad de hacer sonar el claxon.
Para acabar de ajustar se había puesto una soga en el cuello, la que poco a poco estaba ahorcándola.
“Solo quería recrear una escena de ‘50 Sombras de Grey’ pero creo que se me fueron de las manos. Lo que pasa es que no tengo pareja y estoy sola”, dijo a las autoridades.
Luego de liberarla, la trasladaron hasta un centro asistencial para valorar su estado.
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