El médico huilense Juan B. Castillo inició una magistral serie semanal de escritos personales, y cuestiona en su edición más reciente por qué las malas noticias son las que más ocupan a los medios. Posiblemente la gente espera que la normalidad y lo positivo vayan de la mano y eso conduce a que muchas cosas buenas que realmente son las que más suceden sean las que pasen desapercibidas.
Por ejemplo, las noticias actuales para el departamento del Huila no son favorables en los temas e indicadores de productividad y competitividad; el departamento ha caído 3 puestos ubicándose en la posición 18 entre 27 a nivel nacional, y esto representa una afectación social y económica que termina sufriendo cada uno de los pobladores del departamento en su vida diaria.
Tratándose de impactos en lo social, infraestructura y deserción escolar, clima de negocios, costos tributarios, salud y educación, es una responsabilidad que corresponde en un 92% a la institucionalidad, es decir, depende de la administración pública mucho más que del sector privado.
Claramente es un tema de la mayor preocupación para el próximo gobierno departamental, y por eso he definido un compromiso consistente en la creación e implementación de la Secretaría de Productividad y Competitividad, que funcione partiendo de su propio ejemplo de eficiencia, control y seguimiento, compuesta por funcionarios del más alto nivel profesional y personal que logre interpretar directamente donde se requieren las articulaciones en los ámbitos, nacional, departamental, municipal, de las asociaciones, la ciudadanía, los gremios, y todo lo que corresponda con la necesidad de evolucionar la dinámica social y económica de los huilenses mediante la organización más estructurada y adecuada de los esfuerzos de todos que genere las mejoras y oportunidades requeridas.
Más allá de los tecnicismos y por ahora para comunicarle hasta al huilense que viva en la finca más apartada de la urbanidad, quiero insistir en la importancia que debemos entender de lo que nos toca asumir y decidir pensando en un departamento efectiva y transversalmente articulado con la modernidad y el futuro, donde prevalezcan las buenas noticias para todos.
